Si bien existen propuestas y programas para que cada vez más gente utilice la bicicleta como medio de transporte sustentable, desgraciadamente el mundo o, al menos, México, continúa siendo un país para automóviles, como lo demuestra el triste retiro de la Ciclovía Recreativa Cabo San Lucas.
Fue el pasado 30 de junio cuando su creador, impulsor y coordinador, Mario Meave, anunció el cierre del espacio ciclista después de funcionar durante 14 años ininterrumpidos. La noticia se torna más triste sabiendo que, justo ese domingo, la Ciclovía Recreativa Cabo San Lucas cumplió su último aniversario.
De acuerdo con Meave, la razón para retirarla fue la falta de apoyo por parte de las autoridades, así como las constantes quejas de los automovilistas y comerciantes. Estos últimos grupos, sobre todo, hacían saber su constante enojo por el cierre de la vialidad los domingos, aunque este ocurría únicamente durante cuatro horas para la libre y segura circulación de los ciclistas.
Así fue como el último recorrido se llevó a cabo el domingo 7 de julio de 2024, sobre los 2.5 km de los que constaba el espacio y donde se realizaban otras actividades lúdicas, como clases de baile.
Ciclovía Recreativa Cabo San Lucas, se va un espacio para el deporte y la familia
Tras el anuncio, Meave se disculpó con todas aquellas personas que utilizaban este espacio cada domingo para hacer deporte, distraerse o pasar un rato agradable con la familia y amigos. Recordó que la Ciclovía Recreativa Cabo San Lucas tenía cabida para todo deportista y transporte no motorizado, pues asistían desde corredores hasta usuarios de bicis, patines, scooters eléctricos, patinetas, etc.
Se trató de un proyecto que emulaba a otros en su tipo, como lo es el Paseo Dominical Muévete en Bici, en la Ciudad de México, o la Ciclovía Bogotá.
Este tipo de ciclopistas no son permanentes, sino temporales durante los domingos. La intención es cerrar la vialidad por algunas horas para que ciclistas y otros usuarios circulen seguros por un rato.
Por salud mental y física, es que cierro el ciclo
Desgraciadamente, no es fácil mantener un sano proyecto cuando no se recibe apoyo por parte de las autoridades ni de la población y, sí, en cambio, insultos y otras faltas de respeto, tanto en persona como en redes sociales.
Durante 14 años, explica Meave, tuvo que enfrentarse a los insultos, gritos y malos tratos de los choferes, quienes siempre mostraron rechazo ante la ciclovía.
Además, el coordinador dijo nunca recibir apoyo ni presupuesto por parte de políticos ni comerciantes, quienes nunca difundieron un mensaje positivo.
“Yo quería hablar con el presidente electo Christian Agundez Gómez, pero ya es demasiado. Hay gente que me grita de cosas, sobre todo los choferes de taxis o transportadoras, personas a las que no les interesa la activación física o la sana convivencia”, comenta Meave.
Es por la falta de apoyos, recursos, abusos verbales y la constante presión de mantener la seguridad, que el coordinador asegura que “por salud mental y física” es que decidió no seguir más con el proyecto.
“No quiero que la ciclovía se siga viendo como un estorbo, ni tener más problemas con la gente que no le da el valor que se merece a este espacio libre de vehículos”, dijo.
Por otro lado, se dijo feliz de cerrar un ciclo en su vida donde vio a niños ejercitándose y participando en las competencias que programaba y, que hoy, son adultos.
La verdadera razón
Si bien Meave dice terminar este ciclo deportivo por su propia salud mental y física, no se le puede culpar de tomar una decisión cuando, como él mismo lo dice, “siempre se nadó contra corriente”.
Por esto mismo, es necesario mencionar las verdaderas razones por las que se cierra la Ciclovía Recreativa Cabo San Lucas, y que no son por “haber tirado la toalla”, como dirían algunos.
Para que un espacio así pueda salir a flote y mantenerse, es necesaria la cooperación y ayuda de las autoridades competentes, desde las municipales hasta las de movilidad. Desgraciadamente, el fundador del proyecto nunca contó con ello y, cuando consiguió un poco, la buena voluntad desaparecía pronto.
“Ninguno de los presidentes en las cuatro administraciones que han pasado se interesó en ningún momento, ninguna autoridad deportiva, ningún regidor. Sin duda, hay una falta de apoyo. Nunca se manejó un presupuesto. Y aunque sí participaron áreas como el DIF y el Instituto de la Mujer, dejaron de participar, y esas son señales de que no les interesa”, aseveró Meave para el diario El Independiente.
Y aunque el impulsor del proyecto también aceptó que con los años fueron disminuyendo los participantes, lo cierto es que no es raro que la afluencia bajara. Si las autoridades no impulsan un proyecto sano y sustentable, así como social, ni se preocupan en brindar la seguridad para el mismo, difícilmente será aceptado y utilizado.
Por ello, es que si Meave consiguió que la Ciclovía Recreativa Cabo San Lucas funcionara durante 14 años es un gran logro, pero también una denuncia ante la falta de apoyo estatal.
“Yo me voy por la puerta grande, yo hice mi trabajo estos 14 años. En las familias, sí, pero sobre todo hice un buen legado en los niños”, finalizó Meave.
